Zappos es un eCommerce comprado por Amazon en 2009 por 1.200 millones de dólares, que desde 2000 a 2008 creció a un ritmo del 124% anual. Todo comenzó con la venta de zapatos y con su fundador fotografiándolos en zapaterías locales, colgando las fotos en su web y volviendo él mismo a comprarlos si había una venta para hacérselos llegar al cliente.
Hace unos días escuchaba en una charla al CPO de Jeff en la que se habló mucho de producto y del crecimiento de la empresa. En 2015 comenzó prestando servicio de lavandería a domicilio y actualmente cuenta con 4 verticales, presencia en 40 países y más de 800 tiendas abiertas con un modelo de franquicia.
En sus comienzos los fundadores recogían la ropa en los domicilios para llevarla a lavanderías próximas, haciendo las rutas en furgoneta y conociendo así a clientes y proveedores.
Estas pruebas de mercado sirven para obtener datos precisos, interactuar con el cliente y ver las reacciones inesperadas, ayudando a reducir la principal causa de fracaso de las startups: sacar al mercado productos que nadie quiere.
La historia me recordó mucho al caso de Zappos pero en este caso, Hecho en España.