Silencio


No hables, no te comuniques, no cuentes. Guarda tus problemas a buen recaudo para que nadie se entere.

Ni los lejanos, ni los cercanos, nadie.

Escóndelos en lo más profundo de ti, para que la gente piense que eres feliz. Fortalece la estructura de tu fachada para que vaya aguantando la presión, que no tengas la más mínima duda, irá en aumento.

No te apoyes en amigos, no te apoyes en familia, no te apoyes en compañeros. Los problemas guardados, hasta que enquisten.

Espera tiempo para sacarlos, hazlo cuando ya no puedas con el dolor. Así en ese momento lo harás con rabia, con desprecio, con mala educación, con odio.

Diciendo cosas que nunca hubieses deseado.

Rompe equipos, crea situaciones desagradables, haz grande lo pequeño. No expreses lo que sientes, no pidas ayuda, no pidas consejo. Descontrola lo que un día pudo ser controlable.


Sufre, llora, grita, lamenta.

Todo, pero en silencio.

Suerte.


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